Se sabe que la era digital no perdona y que el hecho de que las consolas tengan dependencia de una conexión a Internet tiene sus pros, pero también sus contras. Justo esto es lo que está pasando con algunos usuarios de Xbox One que reportan una falla que prácticamente deja inservibles sus consolas.
Jugadores aseguran que no pueden actualizar de ninguna forma sus Xbox One modelo 2013
De acuerdo con reportes de usuarios del foro NeoGAF, algunas consolas Xbox One del modelo original (aquel que salió en 2013) no se pueden actualizar de ninguna forma y por ende no se puede jugar en ellas. Al respecto, todo inició con un mensaje por parte de un jugador que compró un Xbox One de primer modelo nuevo y sellado, al realizar el proceso de configuración de la consola, el sistema le indicó que era necesario actualizar para tener la versión más reciente del sistema. Sin embargo, esto no pudo llevarse a cabo pues se arrojaba mensaje de error.
Posteriormente, en un intento de hacerlo de forma alternativa tal como lo recomienda Microsoft descargando el firmware en una USB para actualizar el Xbox One desde este dispositivo, el resultado fue el mismo. Por lo anterior, la consola no se puede usar, no corren los videojuegos y queda inservible hasta nuevo aviso.
Según reportes de VGC y Digital Foundry, es posible que aquellos Xbox One de primera generación, así como aquellos que no han sido actualizados en un buen tiempo y tengan firmware «viejo», no pueden recibir correctamente la actualización de sistema. Hasta ahora, se indica que este problema se presenta con los modelos de Xbox One originales, no así con Xbox One S o Xbox One S All Digital. Microsoft no se ha pronunciado al respecto.
Por otra parte, los intentos de regresar el Xbox One a su estado de fábrica y actualizar bajo esa condición no han dado resultado, así que la comunidad está en alerta por lo que suceda en las próximas horas y días. Asimismo, esto puede ser un tema a considerar en el futuro a corto y mediano plazo para aquellos que deseen comprar una consola de anterior generación nueva y sellada.
Lamentablemente, las últimas generaciones de consolas adoptaron un proceso de validación vía Internet para certificar al usuario, al hardware y sus videojuegos originales, de ahí que actualizar sea obligatorio al sacar el sistema de su caja, conectarlo y echarlo a andar. En el caso de Xbox, se ha criticado que este proceso se realice de vez en cuando a lo largo de los años, pero en caso de que falle y que el usuario no haya seleccionado su consola como principal, es imposible usarla.
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