En abril de 2023, Elena Fort, la vicepresidenta institucional del Barça, informaba de los detalles del exilio al estadio de Montjuïc. En octubre de 2024 ha expuesto los detalles del regreso al Spotify Camp Nou, pero todavía sin precisar el día ni el partido.
Pese a que desde el club se han barajado públicamente los meses de noviembre, diciembre y enero, y la última previsión insinuada por Joan Laporta era a principios de 2025 -el primer partido sería el Barça-Valencia el fin de semana del 25 y el 26 de enero-, Fort ha afirmado: «Se está trabajando para que sea antes de final de año». La obsesión original de la junta no ha cambiado. Se trata de «volver a casa lo más pronto posible».
Butacas definitivas
«Muchas razones y muchas circunstancias pueden hacer variar la fecha exacta», añadió la dirigente azulgrana, sin precisar cuáles son esas razones y esas circunstancias, englobadas entre la burocracia de los permisos y licencias que han de conceder las instituciones públicas y la conclusión de los trabajos para que el recinto sea apto para acoger a los espectadores.
Se dan por supuestas las incomodidades que sufrirán los asistentes, con las obras todavía en marcha, pero las 62.000 personas que podrán acudir al estadio se sentarán en las butacas ya definitivas, los baños y aseos estarán instalados y habrá servicio de restauración. La iluminación será todavía provisional porque la magnitud del estadio aumentará cuando esté terminado en el verano de 2026 y se multiplicará la luminosidad requerida. Los asistentes transitarán, en los alrededores, con las grúas y la maquinaria estacionadas en los días de partido. Apenas habrá 200 plazas de parking para compromisos y necesidades operativas.
La frontera de enero
Sin embargo, de esas 62.000 plazas habrá solo 45.000 localidades reservadas para abonados en las competiciones de Liga y Copa del Rey y 40.000 para los partidos de las eliminatorias de la Champions. El último de la liguilla, frente al Atalanta (29 de enero), tiene que disputarse en la montaña por orden de la UEFA.
«No tendremos dos estadios abiertos», dijo Fort. Joan Centelles, el director operativo del Espai Barça, remachó: «Estar en Montjuïc nos sale extremadamente caro». Un motivo más para regresar lo más pronto posible a Les Corts. Cuando se consume, será definitivo. Por tanto, esas palabras sugieren que la fecha del retorno podría ser el 1-2 de febrero con el Barça-Alavés.
Los abonados al Lluís Companys de Montjuïc (17.699 personas) de la campaña 2023-24 tendrán un pase garantizado, a no ser que renuncien a él, por lo que, en realidad, habrá 27.301 asientos a disposición de los abonados y los socios, que tendrán que presentar una solicitud entre el 11 y el 23 de octubre para optar a una plaza. Si hay más demanda que oferta se celebrará un sorteo para las asignaciones. Los interesados tendrán que especificar en el formulario si desean asistir solo a Liga y Copa o a las tres competiciones; en ese caso, correrán un riesgo por cuanto 5.000 localidades desaparecen porque las requiere la UEFA.
Precios más altos
Los precios de la media temporada que se prevé del Spotify Camp Nou oscilan entre los 260 euros en los goles primera gradería (295 en la segunda), los 333 euros de los córners (355 en el anillo superior) y entre los 400 y los 755 euros las localidades más caras de Lateral y Tribuna. Los palcos privados todavía no existirán, ya que van situados en la zona superior a la segunda gradería y se construirán, junto con la tercera, durante la campaña 2025-26. Sí habrá localidades consideradas vip, que da acceso a zonas privadas y el catering.
En el Olímpic, la horquilla de precios para la primera mitad de la campaña son más baratos. Van desde los 132 euros de los goles con visibilidad del 80% a los 449 euros de las tribunas más caras.
Una torre Agbar y un millón
El sistema de funcionamiento en el estadio será igual que el implantado en Montjuïc. El club da a elegir la zona en la que el culé quiere ser ubicado, pero el asiento será variable en cada partido y se tendrá que confirmar la asistencia cada vez.
Fort y Centelles justificaron la imprecisión de no poder concretar la fecha exacta por las distintas velocidades de la burocracia y los trabajos. «Para que se den cuenta de la magnitud de las obras que se están haciendo: cada dos meses construimos una torre Agbar», explicó Centelles, añadiendo otra precisión sobre el precio que se paga: «Cada día de obra tiene un coste de un millón de euros».
El censo: 133.164 socios
El proceso de regularización efectuado por el Barça para concretar cuál es su masa social real arrojó un censo de 133.164 socios. El 90% de las personas han cumplimentado los requisitos, y se han dado de baja 14.338, de las que 3.118 eran abonados y, por tantos, son asientos libres que se destinarán a la lista de espera del futuro Camp Nou.
Ese proceso que duró de marzo de 2023 hasta abril de 2024, no se da por terminado. El club ha mantenido contacto directo con socios para que pudieran regularizar su situación. Durante la pasada campaña se registraron 5.892 altas y 3.236 bajas.