America Pac, el grupo financiado por el multimillonario Elon Musk para contribuir a la reelección del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, está teniendo dificultades en algunos estados para cumplir sus objetivos, al mismo tiempo que investiga las presuntas falsedades sobre el número de votantes con los que sus trabajadores han contactado, según cuatro personas involucradas en sus actividades.
Según Alysia McMillan, quien trabajó en Wisconsin para el comité financiado por Musk, los organizadores de campo recientemente explicaron a los activistas que no estaban alcanzando los objetivos diarios y que iban camino de no alcanzar la meta de contactar a 450.000 votantes para el día de las elecciones. En una reunión con los encuestadores, grabada por McMillan y revisada por Reuters, un gerente advirtió sobre este problema.
«No vamos a llegar a 450.000, no con lo que tenemos ahora», dijo el directivo en la reunión del 8 de octubre.
«Si esto no se analiza a tiempo, se pondrá en riesgo la victoria del presidente Trump”, dijo a Reuters McMillan.
Desde Arizona, otro colaborador del comité a favor de Trump señaló que allí los responsables habían admitido advertencias similares, y otras tres personas familiarizadas con estos hechos dijeron a Reuters que Chris Young, un asistente de Musk, había viajado recientemente a Nevada para auditar si algunos de los trabajadores habían inflado las cifras de los contactos puerta a puerta. Otra persona al tanto dijo que America PAC estaba luchando por encontrar suficientes personas para realizar auditorías en otros estados.
Una persona cercana a las operaciones de America PAC, en cambio, dijo que la versión de McMillan es inexacta y que el grupo alcanzará sus objetivos en Wisconsin.
Puerta a puerta
America PAC se basa en el trabajo puerta a puerta para convencer a los electores que dudan entre apoyar a Trump o quedarse en casa. Su trabajo se ha centrado en los llamados ‘swing states’ (estados que no son siempre fieles a demócratas o republicanos), donde cualquier pequeña diferencia en la participación electoral podría asegurar la victoria de Trump o de la vicepresidenta Kamala Harris, la candidata demócrata, en una elección que las encuestas siguen dibujando como muy reñida.
Musk, que según la revista Forbes es la persona más rica del mundo, ha aportado hasta ahora al menos 75 millones de dólares a America PAC, lo que convierte al grupo en una parte crucial del intento de Trump de recuperar la Casa Blanca. El empresario detrás del fabricante de automóviles Tesla y de la empresa de cohetes y satélites SpaceX, quien no quiso hacer comentarios, ha apoyado cada vez más las causas republicanas. Este año, el magnate se convirtió en un abierto partidario de Trump, quien ha dicho que si es elegido designaría a Musk para encabezar una comisión de eficiencia gubernamental.
Gran parte del trabajo de America PAC ha estado presidido por el desorden, dijeron a Reuters fuentes al tanto del trabajo del comité. El grupo ha contratado a trabajadores para ir de puerta en puerta a hablar con los votantes potenciales de Trump.
Tres de estas personas, que pidieron no ser identificadas, dijeron a Reuters que el trabajo no vale la pena. En algunos casos, agregaron, los encuestadores conducen largas distancias en áreas remotas y no reciben reembolso por la gasolina.
En Nevada, no está claro si la auditoría de Young concluyó, llegó a algún hallazgo o provocó algún cambio en el alcance de America PAC. Los mensajes de texto revisados por Reuters muestran a los gerentes de un contratista de Nevada, Lone Mountain Strategies, preocupados porque tuvieron que despedir a los encuestadores que usaban aplicaciones de teléfonos inteligentes para disfrazar sus ubicaciones y mentir sobre sus números de visitas.
«Nuestros auditores siguen descubriendo gente haciendo trampa», decía uno de los mensajes. «Hemos despedido a dos personas hoy y los auditores están revisando las puertas en busca de folletos».