«No daré un paso atrás en absoluto. Más que nunca quiero hacerlo». La voz de Pep Guardiola sonaba fuerte y convincente, a pesar de que encajó el pasado sábado ante el Brighton su cuarta derrota consecutiva, que le precipita a un escenario desconocido, al que se enfrenta con rebeldía.
Vive su novena temporada en el Manchester City, club y equipo al que ha transformado en una referencia mundial, adueñándose de la Liga -«tal vez después de siete años ganando seis Premier Leagues, tal vez un año otro equipo lo merezca» , ha dicho el técnico- y se enfrenta a un paisaje nunca visto antes.
Justo en el momento en que se debate sobre su futuro –acaba contrato en junio de 2025– expuesto al profundo cambio que se vivirá con la marcha, voluntaria marcha, de Txiki Begiristain al final de temporada. Dentro de unos meses se vivirá en el lado azul de Manchester el inicio de una nueva era. ¿Con o sin Guardiola?
Él está allí, precisamente, por él. No habría ido Guardiola al City de no estar antes Txiki, a quien el club ya ha encontrado recambio en la figura de Hugo Viana, el aún director deportivo del Sporting de Portugal, que ha visto cómo su entrenador Rubem Amorin ya está en Old Trafford dirigiendo al Manchester United.
Son, por lo tanto, tiempos convulsos en un club que vive la mejor época de su historia, con una Champions en el bolsillo que lo coloca entre los grandes de Europa. Enfrentado, eso sí, al enorme peso que supone mirarse cada día a su propio espejo tras encadenar las cuatro últimas Premiers de forma consecutiva.
«No daré un paso atrás en absoluto. Más que nunca quiero hacerlo»
Ni siquiera él, en 2016, recién salido del Bayern Múnich, y por deseo propio, pudo imaginar lo que le esperaba en Inglaterra para reunise con su amigo del alma. Chelsea y United le ofrecían entonces más dinero y, tal vez, hasta más recursos. Pero Guardiola eligió reencontrarse con Txiki, una de las personas claves en el mágico Barça del sextete porque pudiendo elegir a José Mourinho, marca de prestigio y con palmarés lujoso, para pilotar el proyecto azulgrana apostó por un técnico que venía deTercera División.
Ahora, Txiki se va. También se fue en enero pasado Omar Berrada, que era director de operaciones del City, y lo acabó fichando el Manchester United como nuevo CEO de Old Trafford. Pero aún se desconoce qué hará Guardiola, sumergido en un problema deportivo del que no existen precedentes.
Ni en Inglaterra ahora. Ni en Alemania antes. Ni siquiera en España en sus inicios. Tiene una plaga de lesiones que ha minado su poderío, sobre todo defensivo, aunque no hay pérdida más dolorosa que la de Rodri, el flamante Balón de Oro, el mejor jugador del mundo. Y el mejor para el técnico porque daba sentido a toda su idea, cosiendo al City.
Rodri y 10 bajas más
Descosido anda, además, por el boquete en el eje de la defensa con las bajas de «los cuatro centrales», como recordó Guardiola en alusión a Rúben Dias, Stones –ni viajaron a Brighton-, Akanji y Aké, que estaban en el banquillo pero no podían ni salir a jugar. De Bruyne está volviendo, pero lentamente de sus reiterados problemas físicos, Doku está lesionado y Grealish, también. Foden no ha ido con Inglaterra por problemas físicos. Oscar Bobb y Matheus Nunes también están de baja.
No es, por lo tanto, el City de la pasada temporada. Un equipo que se reforzó de manera austera en el mercado veraniego porque solo invirtió 25 millones para reclutar a Savinho, que brilló en el Girona, pero pertenecía al Troyes, y rescató a Gündogan, que ya no era querido en Barcelona. «¿Cómo se compara con temporadas anteriores? En esas temporadas teníamos jugadores», dijo el entrenador, negando que lo use como una excusa.
A cinco puntos del Liverpool
Aunque es una realidad. El Liverpool de Arne Slot, el entrenador que ha hecho olvidar a Jürgen Klopp en tiempo récord, vuela por la Premier, aprovechando esa provisional caída ‘citizen’. Le saca ya cinco puntos de ventaja, oteando a nueve a Chelsea y Arsenal. A Guardiola, ahora mismo, no le alcanza, que diría Messi, para competir cada tres días, a pesar de que los registros goleadores de Haaland se mantienen intactos: 15 tantos en los 16 partidos oficiales, casi uno por encuentro.
Y esos 11 días trágicos simbolizan los problemas del equipo. Genera mucho, pero marca poco: cuatro goles en cuatro partidos. Intimida, pero no golpea, añorando los goles de Foden o los disparos lejanos de De Bruyne que rasgaban a los rivales. Tottenham (2-1), Bournemouth (2-1), Sporting de Lisboa (4-1) y Brighton (2-1) han castigado con acierto a una defensa irreconocible, que ha encajado 10 goles en 11 días que han ido de derrota en derrota.
¿Cuatro derrotas? «Normalmente la gente pierde partidos. Siempre hay una primera vez en tu vida»
«Normalmente la gente pierde partidos. Siempre hay una primera vez en tu vida», explicó Guardiola tras escuchar un singular cántico de los aficionados del Brighton en el que le auguraban poco futuro en el City. «¡¡¡Te van a despedir mañana!!!».
No es ese, sin embargo, el plan de la propiedad del club inglés, quien confía en que el técnico acepte la oferta de renovación para completar una década en Inglaterra rompiendo todos los registros que tuvo previamente en Barcelona (cinco años, cuatro en el primer equipo y uno en el filial) y Múnich (tres temporadas).
Aunque si renueva tendrá que trazar este nuevo camino ya sin Txiki, aparcando, de momento, el último destino que tiene en los banquillos. ¿Cuál? Dirigir a una selección que le permita vivir la experiencia de un Mundial desde el banquillo.
«Diría que una parte de mi vida se va con Txiki», confesó cuando se hizo oficial la marcha del ejecutivo vasco. Quizá por eso, justo ahora que pisa un territorio desconocido, se rebela. Y no lo hace solo. «¡Que duden de nosotros! ¡Que duden», confesó Rúben Dias a la BBC, al tiempo que entendía como «normal» esta mala racha de su equipo. «Es normal porque mucha gente quiere derribarnos», añadió el central portugués.
«Este es mi desafío, nuestro desafío. Me gusta afrontarlo. No daré un paso atrás», proclamó con energía Guardiola. «En absoluto. Más que nunca quiero hacerlo y lo intentaremos de nuevo».
Los 11 días negros de Guardiola con el City
4 derrotas con el Manchester City (24-25)
9 noviembre: Brighton-City (2-1), Premier.
5 noviembre: Sporting Portugal-CIty (4-1), Champions.
2 noviembre: Bournemouth-City (2-1), Premier.
30 octubre: Tottenham-City (2-1), Carabao Cup.