Las estafas online han evolucionado junto con la tecnología, convirtiéndose en una amenaza creciente para los usuarios de internet. Desde correos electrónicos fraudulentos hasta sitios web falsos, los ciberdelincuentes emplean tácticas cada vez más sofisticadas para robar información personal y dinero.
Para hacer frente a estas amenazas, Google ha lanzado una nueva iniciativa para ayudar a las personas a detectar y prevenir fraudes en línea. Según su blog oficial, la herramienta rastrea patrones de actividad sospechosa y brinda recomendaciones específicas para evitar caer en trampas.
La iniciativa refuerza el compromiso de Google con la protección de los usuarios y responde al aumento de ciberdelitos sofisticados, como ataques de ‘ransomware’ (secuestro de datos) dirigidos a infraestructuras críticas. En un entorno digital complejo, estas herramientas son esenciales para garantizar un uso más seguro de la tecnología.
Sin embargo, a pesar de la existencia de iniciativas para combatir las estafas online, estas siguen buscando su hueco en internet. A continuación, te contamos cuáles son los cinco fraudes más comunes en la red, según Google:
Suplantación de personalidades públicas
El auge de la tecnología ‘deepfake’ (aquella que utiliza inteligencia artificial para crear vídeos, audios o imágenes falsas que parecen reales) ha permitido la creación de campañas de suplantación de personalidades públicas para promover fraudes, como inversiones falsas y aplicaciones dañinas.
Criptomonedas
Google advierte sobre el aumento de fraudes con inversiones en criptomonedas, que prometen ganancias irreales y emplean suplantaciones de identidad hiperrealistas.
Muchos de estos esquemas provienen de organizaciones criminales extranjeras, dificultando la acción legal.
Clonación de aplicaciones
Los estafadores emplean tácticas de clonación de aplicaciones y páginas de inicio de sesión para engañar a usuarios y empleados, imitando sitios legítimos para robar credenciales, instalar ‘malware’ o realizar compras fraudulentas.
Estas estrategias incluyen réplicas de portales corporativos para obtener acceso no autorizado a sistemas internos, causando violaciones de datos y pérdidas financieras.
Enmascaramiento de páginas de destino
Los estafadores usan tácticas como el ‘cloaking’ (técnicas de posicionamiento web para engañar a los motores de búsqueda y mejorar la posición en los resultados) para mostrar contenido diferente a Google y evitar la detección, dirigiendo a los usuarios a páginas que simulan urgencia para vender productos falsificados o poco realistas.
También emplean redirecciones hacia sitios de ‘scareware’, que engañan a los usuarios con mensajes falsos de ‘malware’ para robar información confidencial.
Explotación de grandes acontecimientos
Los estafadores están utilizando la IA para perfeccionar fraudes, especialmente en eventos importantes como elecciones, desastres naturales o programas populares, haciéndolos más creíbles y oportunos.
Ejemplos recientes incluyen estafas relacionadas con el eclipse solar de abril y falsas organizaciones benéficas durante desastres naturales.