Unos 200 componentes de la Grada d’Animació han protestado antes del Barça-Las Palmas frente a la puerta 59, justo debajo del pebetero del Estadi Olímpic, por la decisión de la junta de Joan Laporta de vetar «sine die» su acceso al estadio hasta que no paguen los 21.000 euros correspondientes a sanciones de la temporada pasada. El club culpa a estos seguidores, de forma colectiva, de cánticos supuestamente ofensivos no revelados que comportaron hasta 14 expedientes sancionadores. «Salvem la Grada», rezaba una pancarta diseñada para la ocasión.
Las cuatro peñas que componen la Grada d’Animació no han logrado que el club acceda a una reunión para tratar de desencallar el conflicto si antes no desembolsan una cifra inasumible para ellos. Ya no pudieron entrar al estadio en el partido de Champions de esta semana ante el Brest y tampoco lo pudieron hacer ante Las Palmas.
Los asientos reservados para ellos fueron ocupados este sábado por peñistas invitados por el club y no fueron comercializados, según Rac1, a diferencia del día del Brest, que ese espacio estaba vacío.
Los seguidores de la Grada d’Animació se concentraron a las 13.15 horas y optaron por limitarse a reivindicar su papel en el apoyo constante al equipo. Hubo algunos gritos esporádicos de «Barça sí, Laporta no», pero fueron rápidamente silenciados por los demás presentes.