Europa se asoma a un segundo mandato de Donald Trump en Estados Unidos con el riesgo de «una nueva guerra comercial en la que todos saldríamos perdiendo»; se la juega ante «el emerger de una potencia, China, que se produce cada vez de una forma más confrontacional»; se pone a prueba frente a un Vladimir Putin al que «no se ve dispuesto a sentarse a una mesa de la que salga con un trozo de Ucrania, pues su pretensión es mucho mayor»; y asiste sin orientación clara al resurgimiento en Siria de «yihadistas que han cambiado el turbante por la blazer azul, que son los mismos, pero tienen un aspecto distinto».
Son pinceladas con las que Josep Borrell ha pintado este martes la inquietante situación internacional en la que se ve la Unión Europea. Al cabo de cinco años de desempeño, el ya ex alto alto representante de la UE para la Politica Exterior y de Seguridad y ex vicepresidente de la Comisión Europea, ha descrito un panorama lleno de variables nada halagüeñas para «una Europa rodeada por un círculo de fuego», ha dicho tirando del título de su último libro.
«Lo que vemos hoy es el fracaso del orden de la postguerra fría», una situación en la que Borrell ve expandirse estos síntomas: «Falta de respeto a la ley internacional, aumento del proteccionismo, erosión del multilateralismo, falta de solución pacífica de los conflictos, retroceso de la democracia, retorno de la guerra a nuestras fronteras y violación sistemática del derecho internacional humanitario en Oriente Medio». O sea, «nada de lo que imáginábamos hace 35 años se ha cumplido».
Esta Europa rodeada de conflictos precisa, en su opinión, de unidad y de conciencia del peligro. Y ambas «para tomar decisiones que se aplazan». Entre ellas, la de rearmarse: «La seguridad de Europa no puede depender cada cuatro años del humor de los electores norteamericanos«, ha sentenciado.