El City no sale del caos. Va de derrota en derrota, cayendo hasta el sexto puesto, superado por el Aston Villa, quien le dejó sin respuestas convirtiendo su crisis en algo inacabable. Perdió en el Villa Park el aún campeón de la Premier transmitiendo, de nuevo, la sensación de tanta vulnerabilidad que llega un simple golpe de aire y se lo lleva por delante, al que de nada le valió el gol de Foden en el tiempo añadido.
Así anda el City, que ha sido noqueado en nueve de los 12 últimos encuentros. No levanta cabeza, sumergido en un abismo al que no se le adivina fin porque los errores se reproducen, partido tras partido, sin que se le adivine una solución.
Durán y Morgan Rogers, la estrella villana con asistencia y gol, plasmaron la más que evidente superioridad del equipo de Unai Emery, a quien el plan le salió perfecto. Y el Aston Villa es otro equipo más que puede presumir de batir al irreconocible City de Guardiola, hundido en el desastre continuo.
Guardiola, en silencio
Se quedó sin palabras el técnico, que observaba en silencio otro nuevo tropiezo. Quedaban dos minutos para acabar el partido y ahí estaba él, con la mirada perdida en el paisaje de Birmingham, acurrucadas las manos en sus bolsillos, asistiendo impotente al desplome del City. Ni agotó los cinco cambios. Hizo Guardiola tres sustituciones (Walker, Savinho y Doku) pero nada modificó el tono sombrío de un equipo angustiado en el que Haaland se marchó sin tirar a puerta.
Mal empezó el partido para el City, a quien Pep Guardiola había modificado su piel, prescindiendo de extremos puros colocando a Bernardo Silva en la banda derecha y Grealish en la izquierda. Mal empezó porque al cuarto de hora ya perdía 1-0 ante el Aston Villa, que supo rasgar con tremenda sencillez la defensa ‘citizen’. Tan mal había empezado todo que Stefan Ortega ya había protagonizado dos paradas decisivas en el primer minuto de partido.
La jugada nació en el pase inicial del ‘Dibu’ Martínez, el portero del equipo de Emery, quien fue el trampolín para un preciso, veloz y, sobre todo, certero contragolpe. Iba el balón de área a área sin que ningún jugador de Guardiola supiera descodificar la jugada. En apenas 10 segundo voló la pelota de los pies del ‘Dibu’ a Duran. Todo muy bien ejecutado por parte del Aston Villa. Todo muy mal ejecutado por el City.
Haaland, desconectado
Esas disfunciones ya se habían advertido en los primeros segundos del partido, donde recibió tres córners en contra. Y cada saque de esquina era una tortura para la defensa del City, que traslada tal imagen de fragilidad que cualquier rival se siente, y con razón, con la autoridad necesaria para abatirlo.
Ese gol, el 1-0, obró un efecto devastador en el equipo de Guardiola, que no tuvo respuestas porque una exagerada posesión en la primera mitad (alcanzó el 67%) no le servía de nada porque estaba desconectado Haaland. Ni un solo remate en los primeros 45 minutos. Nada de nada. Y no era responsabilidad del delantero noruego sino de su equipo que lo dejó desconectado en el área del Aston Villa, bien encarcelado tácticamente por Pau Torres y Ezri Konsa. Se llevaba una hora de partido y no había tocado ni un solo balón dentro del área enemiga, el peor síntoma para un City, que entró a la segunda parte igual de mal que se fue en la primera.
El impacto de Morgan Rogers
Tuvo, además, un golpe de fortuna porque un disparo de Morgan Rogers fue repelido por el poste derecho de Stefan Ortega para mantener con respiración asistida al City. En el descanso, Guardiola no tocó nada en ataque. Hizo un solo cambio atrás (entró Kyle Walker por un desacertado Stones, retratado en la jugada del 1-0), pero nada cambió.
Hasta que Morgan Rogers arrancó como un bisonte desde su propio campo, sin que nadie pudiera detenerlo. Corrió más de 60 metros revelando la tremenda fragilidad del City, que no tuvo respuesta a esa cabalgada. Y llegó el joven delantero, de 22 años, a la casa de Ortega con toda la calma del mundo para firmar el 2-0.
Ya con todo en contra, Guardiola introdujo a Savinho y Doku para agitar un partido que tenía perdido casi desde el inicio. No sacó a De Bruyne, que vio sentado desde el banquillo la derrota. A Guardiola se le veía desesperado porque su City ya no es el que era, superado en la quinta plaza por el Aston Villa (28 puntos), confinado en el sexto lugar (27), obligado a luchar por entrar en Europa. El mejor fue Stefan Ortega, que firmó cuatro paradas, evitando que la derrota fuera todavía más amplia ya que el gol de Foden llegó demasiado tarde.
La ficha del Aston Villa-Manchester City (2-1)
Aston Villa: ‘Dibu’ Martínez, Cash, Konsa,, Pau Torres, Digne, Kamara, Onana, McGinn, Tielemans, Rogers y Durán.
Entrenador: Unai Emery.
Cambios: Watkins por Durán (m. 81); Buendia por Morgan Rogers (m. 90+1)
Manchester City: Stefan Ortega, Akanji, Stones, Gvardiol, Lewis, Kovacic, Gündogan, Bernardo Silva, Foden, Grealish y Haaland.
Entrenador: Pep Guardiola
Cambios: Walker por Stones (m. 46); Savinho por Gündogan (m. 73); Doku por Kovacic (m. 84).
Goles: 1-0, Durán (m. 16); 2-0, Morgan Rogers (m. 65); 2-1, Foden (m. 90+3).