El Barça de basket se aboca al desastre. Porque sería un desastre deportivo que el equipo de Joan Peñarroya no se clasificara para disputar la fase final de la Copa del Rey. Por el potencial de la plantilla y por el prestigio del club.
El rendimiento de la sección bordea el fracaso más estrepitoso, en noveno lugar de la Liga ACB, con 7 victorias y 8 derrotas, y décimo en la Euroliga (10 victorias y 9 derrotas). El Barça ha perdido tres partidos consecutivos. La gravedad del caso es que la última se produjo el martes en Girona, en casa del colista (91-90). El mismo resultado que en el anterior derbi catalán con el Joventut en el Palau (90-91) del domingo.
Joan Peñarroya durante el partido frente al Paris de la Euroliga el pasado 3 de enero. / Teresa Suarez / Efe
Pesic, en la recámara
El rendimiento deportivo es tan deficiente que la junta azulgrana se plantea el cambio de entrenador. Svetislav Pesic es el candidato principal a sustituir a Peñarroya, que ha empeorado las prestaciones del equipo que heredó de Roger Grimau; medio equipo, en realidad, ya que obtuvo cinco fichajes. El técnico asume que el acceso a la Copa se ha complicado inesperadamente hasta el punto de que el Barça está fuera de los ocho primeros que la disputarán y que no depende de sí mismo.
«Es evidente que la posición en la que estamos no es la que debería estar un equipo como el nuestro», admitió Peñarroya que dijo estar «jodido» porque «no tendríamos que estar en esta situación». El técnico afirmó que tiene «el apoyo de la gente que trabaja en el club» pero también ve claro que «puede haber dudas» respecto a él con la trayectoria del equipo.
«Es evidente que la posición en la que estamos no es la que debería estar un equipo como el nuestro»
El base nigeriano del Basquet Girona Ike Iroegbu intenta superar a Justin Anderson el martes en Fontajau. / David Borrat /Efe
La erosión del ‘show Heurtel’
El show montado alrededor de la contratación y la renuncia al fichaje de Thomas Heurtel ha deteriorado aún más la imagen de la sección, entre la descoordinación existente entre el cuerpo técnico y la jefatura, las disensiones sobre la conveniencia de recuperar a un base que engañó a la entidad y la desautorización final, no se sabe si encabezada por el presidente Joan Laporta o por Josep Cubells, el máximo responsable de la parcela del baloncesto.
Se han disputado 41 ediciones con el formato organizado por la ACB de eliminatorias de cuatro participantes (las tres primeras) y ocho participantes (las 38 siguientes) y el Barça ha estado en todas hasta acumular 14 títulos, aunque también sucumbiera contra todo pronóstico en ocasiones en los cuartos de final. Nunca peligró su clasificación para el torneo (entran los ocho primeros de la liga), y nunca estuvo con un pie fuera. Pero este año se asoma a la condena de ver por televisión el evento al que jamás falló, que en 2025 se celebrará entre el 13 y el 16 de febrero en Las Palmas. Es noveno.
El Barça nunca ha fallado en las 41 ediciones en las que se disputa la Copa con los ocho primeros de la Liga
Juan Núñez trata de superar la defensa de Juani Marcos, del Girona. / David Borrat / Efe
Dos plazas libres
A falta de dos jornadas para que se corte el periodo de clasificación hay seis equipos que han podido comprar vuelos y reservar habitaciones. Son, por este orden, Unicaja Málaga, Valencia, La Laguna Tenerife, Real Madrid, Joventut y Dreamland Gran Canaria. Las otras dos plazas se dirimirán en las dos próximas jornadas entre seis equipos con opciones.
Baxi Manresa y Casademont Zaragoza tienen una victoria más que el Barça y se enfrentan entre ellos, con lo que el Barça estaría en disposición de igualar al perdedor. Los azulgranas se enfrentan al Gran Canaria y al Surne Bilbao. En caso de un triple empate o mayor, contará el ‘basket average’ general. El Barça cuenta con +41 en puntos a favor, superado por el del Manresa (+55) y superior al del Zaragoza. El Baskonia pisa los talones de los azulgranas. Con un partido menos, les puede igualar en la clasificación.
Kevin Punter, durante el duelo ante el Joventut en el Palau Blaugrana el pasado domingo. / AFP7
Manos fiables
La derrota de Girona fue similar a muchas de la temporada. El Barça sucumbió en un final apretado, cuando se requiere aplomo, serenidad y buenos tiradores. La apuesta exclusiva por Kevin Punter se ha tornado errónea. Los rivales ya conocen quién es el elegido azulgrana y focalizan su defensa en él.
Punter recibe el balón lejos de la zona de tiro y debe trabajarse la jugada por sí solo, sin mirar ni detectar si hay un compañero en mejor posición. Chimezie Metu, Jabari Parker, Alex Abrines, Darío Brizuela y Jan Vesely también poseen una mano fiable en el momento crítico.
No fue el caso de Girona, donde el quinteto azulgrana desperdició una renta de 10 puntos (75-85) a tres minutos del final, encajando de nuevo 90 puntos y confirmándose como la sexta peor defensa de la Liga ACB. «Tenemos que seguir picando piedra», recetaba Peñarroya.
