A pesar de una nueva ola de contagios por COVID-19 causada por la variante ómicron, la economía de Estados Unidos agregó 467,000 puestos de trabajo en enero, según cifras oficiales divulgadas este viernes, mucho mejores a lo esperado.
El informe del Departamento de Trabajo, que también mostró que la tasa de desempleo aumentó levemente a 4 % en enero, fue una sorpresa positiva para la mayor economía del mundo, ya que muchos analistas esperaban que la contratación de mano de obra fuera débil o negativa en el primer mes de 2022.
Entre las principales sectores que contrataron el mes pasado se incluyen bares y restaurantes, que aumentaron el número de empleos más que cualquier otro sector con 151,000 nuevos empleos.
Los servicios profesionales y empresariales agregaron 86,000 puestos de trabajo y el comercio minorista otros 61,000.
La economía añadió 19.1 millones empleos desde el nadir de la crisis del COVID-19 en abril de 2020, pero aún le faltan 2.9 millones de empleos, según los datos.
Hubo entonces signos del impacto del coronavirus en la estadística, incluyendo un salto de seis millones en el número de personas que dijeron no poder trabajar porque la empresa en la que trabajaba estaba cerrada o afectada por la pandemia.
En diciembre, solo 3,1 millones de trabajadores estaban en esta situación.
El gobierno también revisó los datos para 2021, y dijo que el empleo ese año fue mayor en 217,000 empleos al reportado inicialmente.
