Los rebeldes sirios han tomado el control de la ciudad de Daraa, en el sur de Siria y capital de la provincia homónima, de la cual ahora controlan más del 90 por ciento, según ha informado el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
El organismo, con sede en Londres e informantes en el país, ha señalado que «las facciones locales» controlan «más del 90 por ciento de la provincia en medio de sucesivas retiradas de las fuerzas del régimen».
«Las facciones habían pedido a las fuerzas del régimen y a los servicios de seguridad en la provincia de Daraa que desertaran de inmediato, además de haber logrado avances significativos sobre el terreno desde las primeras horas de la mañana», han explicado.
Así, los rebeldes pudieron hacerse con el control «total» de «numerosos emplazamientos militares, puestos de control y cuarteles».
Daraa es conocida como la cuna de la Primavera Árabe en Siria, la revolución que comenzó con el arresto de un grupo de jóvenes por hacer pintadas contra el Gobierno y acabó degenerando en una guerra civil.
El Ejército sirio recuperó el control de la provincia en 2020 gracias al apoyo de Rusia y un acuerdo mediado por Damasco y Moscú acabó dejando dejando su control en manos de un heterogéneo colectivo de grupos locales, como la Octava Brigada o los Comités Centrales, en medio de un escenario enormemente conflictivo.
En este sentido, el portal de noticias local Daraa24 ha publicado un comunicado de estos grupos que anuncian la constitución del llamado Mando de Operaciones Sur, una alianza armada que señala a Damasco como «su objetivo principal».
Este mismo medio lleva horas informando de retiradas de militares de sus posiciones en la ciudad y alrededores, sin que por ahora el Ejército sirio se haya pronunciado al respecto.
En su comunicado, el Mando Sur destaca que ha sido creado para proteger las fronteras del sur del país con Jordania y restablecer la estabilidad, al tiempo que ha llamado a la deserción a las fuerzas del Gobierno sirio.
Esta nueva alianza asegura además que cuenta con la colaboración de milicias locales de Sueida, en el sur del país y otro escenario de conflicto por el levantamiento protagonizado por las milicias de la minoría drusa contra las fuerzas del Gobierno sirio.