En el Líbano, Israel libra una guerra sin campo de batalla. Eso mismo lleva dos días acentuando el Ejército hebreo. El lunes por la noche un ataque israelí alcanzó el punto más alejado de la frontera desde el inicio de la guerra. Los aviones de guerra hebreos mataron a 14 personas en un bombardeo contra un edificio en la región de Akkar, al norte del Líbano, a 150 kilómetros de la frontera. Horas después, han continuado bombardeando el sur de Beirut, la capital libanesa. En la Franja de Gaza, tampoco han detenido la violencia que ha arrasado con al menos 25 vidas desde esta madrugada.
No hay lugar que se libre de las bombas israelíes en todo el Líbano, que ya han matado a 3.287 personas y herido a 14.222. El lunes por la noche un edificio residencial que acogía refugiados sirios y personas desplazadas de otras partes del país desapareció después de que un misil hebreo impactara contra él. Al menos 14 personas murieron como resultado del ataque y otras 15 resultaron heridas. Esta vez el ataque golpeó Ain Yaaqoub, a unos 10 kilómetros de la frontera con Siria. Es una región muy empobrecida con presencia de población refugiada. En los vídeos posteriores a la agresión, se ve a simples civiles buscando entre los escombros con las linternas de sus teléfonos.
Además, el día anterior, 23 personas habían muerto en otro bombardeo contra un edificio donde se estaban quedando desplazados en Almat, al norte de Beirut. En todo el lunes, un total de 44 personas murieron en ataques israelíes y 88 resultaron heridas alrededor del país. Este lunes han vuelto los ataques israelíes contra los suburbios sureños de Beirut. Durante la mañana, el portavoz del Ejército en árabe, Avichay Adraee, ha publicado órdenes de evacuación para 11 edificios y sus inmediaciones. Aunque hace semanas que la mayoría del barrio está vacío, muchas familias retornan cada mañana a la zona para recoger algunas pertenencias, comprobar si su edificio sigue en pie o alimentar a sus mascotas.
Dos muertos en Israel
Por otro lado, en Israel, el lanzamiento de varios drones desde el Líbano ha provocado que sonaran las sirenas antiaéreas en Tel Aviv y el centro del país. Dos personas han muerto en Nahariya, al norte de Israel, como resultado del impacto de un cohete lanzado desde el Líbano. A su vez, en medio de la euforia por la victoria de Donald Trump en las elecciones de Estados Unidos, en Israel han empezado a hacer planes. Este lunes el ministro de Finanzas de extrema derecha, el colono Bezalel Smotrich, ordenó los preparativos para la anexión de la Cisjordania ocupada antes de que Trump asuma el cargo en enero de 2025. “2025: el año de la soberanía en Judea y Samaria”, escribió Smotrich en X, utilizando el nombre bíblico con el que Israel se refiere a la Cisjordania ocupada.
Durante una reunión de su partido ultraderechista en la Knesset, el Parlamento israelí, Smotrich dio dio la bienvenida a la victoria electoral presidencial estadounidense de Trump y dijo que había dado instrucciones a la Dirección de Asentamientos y a la Administración Civil del Ministerio de Defensa para sentar las bases para la anexión. Más allá de su cartera de finanzas, el líder de Sionismo Religioso, que vive en un asentamiento ilegal israelí, también ocupa un puesto en el Ministerio de Defensa de Israel, donde supervisa la administración de la Cisjordania ocupada y sus colonias ilegales de acuerdo al derecho internacional.
Mientras el foco mediático ha estado centrado en la Franja de Gaza durante el último año, Smotrich y sus aliados han aprovechado la falta de atención internacional para cambiar la realidad sobre el terreno en la Cisjordania ocupada. Desde el 7 de octubre de 2023, los territorios ocupados palestinos están siendo escenario de la acelerada expansión de los asentamientos, la impune violencia de colonos y soldados y la apropiación histórica de tierras palestinas por parte de las autoridades israelíes. Smotrich confía que la llegada de Trump a la Casa Blanca le dará aún más carta blanca para anexionarse tierra palestina.
Al límite del plazo de Washington
El otro territorio palestino bajo constante asedio, la Franja de Gaza, ha vuelto a lamentar la muerte de al menos 25 personas este martes en diferentes ataques israelíes. Once de ellas han muerto en un campamento de tiendas de campaña en la zona humanitaria de al Mawasi, en el sur del enclave. Mientras, los ministros del gabinete del primer ministro, Binyamín Netanyahu, discuten cómo mejorar la situación humanitaria en el enclave antes de la fecha límite impuesta por Estados Unidos hace un mes que expira este miércoles. Entonces, la administración del presidente Joe Biden dio 30 días a Netanyahu para que abordara la crisis humanitaria o se arriesgara a un embargo parcial de armas por parte de Washington.
Una de las medidas exigidas por EEUU era que Israel aumentara la cantidad de ayuda que llega a Gaza a 350 camiones por día. Esa cifra ha estado muy por debajo de los 100 camiones de media durante los últimos meses. Este domingo el gabinete de seguridad ha aprobado un aumento no especificado de la cantidad de ayuda que entra a la Franja, aunque un funcionario anónimo ha confirmado que no alcanzará el objetivo de 350 camiones. También han aprobado la expansión hacia el interior de la zona humanitaria costera de Muwasi, esa misma que este lunes ha sido atacada por el Ejército israelí.