La embajada de Ucrania en Madrid ha recibido este lunes una amenaza escrita de ataque con explosivos, concretamente minas. La amenaza se inscribe en una campaña más amplia, por la que 72 legaciones diplomáticas e instalaciones ucranianas en el exterior han recibido advertencias de atentado del mismo tenor en esta misma jornada.
La embajada en España ha informado a la Policía Nacional, con la que se ha coordinado su servicio de seguridad para comprobar esa amenaza, confirman fuentes cercanas al caso. Policías de diversos países europeos investigan al tiempo las cartas, recibidas de forma prácticamente simultánea este 14 de octubre en sedes ucranianas de ciudades como Londres, París, Washington o Lisboa. La amenaza advierte de la colocación de minas en las instalaciones; en otros casos, lo que se ha enviado es una amenaza genérica de bomba o se citan granadas u otro tipo de artefactos explosivos.
El texto que ha llegado a Madrid, en forma de envío postal, presenta características particulares: está escrito en ucraniano, si bien, por algunos giros o inexactitudes, «parece traducido del ruso por algún programa informático», indican las mencionadas fuentes.
En Madrid la amenaza ha provocado que tuvieran que ser suspendidas las gestiones consulares cara al público hasta que terminara una revisión que ha descartado la presencia de minas o cualquier otro explosivo en el edificio o en los alrededores, un vecindario de embajadas que se levantan en el distrito madrileño de Hortaleza.
La embajada ucraniana se encuentra bajo permamente vigilancia de la Policía desde febrero de 2022, cuando comenzó la actual fase de la guerra de invasión rusa, y ya ha sido acordonada y revisada en otras dos ocasiones por envío de explosivos o vísceras de animales.
En Portugal, otra
La legación se ha dirigido a los ciudadanos ucranianos para pedir disculpas por la suspensión momentánea de la atención al público, argumentando que la seguridad de sus nacionales es lo prioritario en el trabajo y restándole importancia a la amenaza. «Estamos acostumbrados», especifica un trabajador de ese edificio.
Este mismo lunes, una amenaza de bomba ha obligado a desalojar la sede diplomática de Ucrania en Lisboa. En este caso, el aviso de atentado llegó pasadas las 10:30 de la mañana, y una posterior revisión a fondo del edificio, en la lisboeta avenida das Descobertas, determinó que se trataba de una falsa alarma, informa EFE.
Representaciones del servicio exterior ucraniano en Londres, París y Washington han recibido también amenazas, según las fuentes consultadas, que en Madrid dan contexto a esta campaña: en territorio ucraniano, relatan, se suceden por rachas amenazas de minado masivo de locales por Rusia, con el fin de paralizar su actividad y causar trastornos en la vida ciudadana. A menudo los objetivos señalados en estas amenazas son escuelas o guarderías en las principales urbes del país.
La embajada de Ucrania en Madrid fue uno de los objetivos del envío de cartas con explosivo pirotécnico en noviembre de 2022, que también llegaron a Moncloa y otros objetivos por su supuesta relación con el apoyo a la defensa ucraniana. El autor de los envíos resultó ser un jubilado de Miranda de Ebro (Burgos), Pompeyo González, de 75 años, que en julio pasado fue condenado a 18 años de prisión.