Hay muertes que terminan por provocar más muertes. Como las de todos aquellos trabajadores de la defensa civil que se encargan de las tareas de rescate y emergencia después de cualquier ataque. Por eso, la pérdida de 21 de estos rescatistas en apenas 24 horas en bombardeos del Ejército israelí es un golpe muy duro para todo el Líbano. Con 15 muertos esta madrugada en Baalbek, al este, y otros seis en el sur del país, ya son más de 200 miembros del personal médico y de la defensa civil libanesa que han perdido la vida en el último año. Mientras, los ataques contra los suburbios sureños de Beirut no se detienen y pulverizan edificios residenciales en segundos.
La mayoría de ellos dormían en el centro de la defensa civil de Douris, cerca de la ciudad de Baalbek. En plena noche, la bomba llegó sin previo aviso e impactó de lleno en el edificio. Una docena de rescatistas murieron prácticamente al instante este viernes de madrugada. Las imágenes que han emergido del lugar muestran un profundo cráter en el lugar donde se encontraba el centro minutos antes. Sus compañeros han tenido que rebuscar entre los escombros para recuperar las partes de sus cuerpos. Entre las víctimas mortales se encuentra Bilal Raad, el jefe del centro de defensa civil de Baalbek.
Esta zona, feudo de Hizbulá y una de las más empobrecidas de todo el Líbano, ha sido duramente castigada durante las últimas semanas. El bombardeo ha destruido el edificio operado por la defensa civil, un servicio de rescate de emergencia sin afiliación política, y una residencia adyacente. Ocho personas, incluidas cinco mujeres, han muerto y 27 han resultado heridas en otro ataque israelí contra la ciudad de Baalbek esta noche. A su vez, en la localidad de Arabsalim del sur del Líbano, otro ataque israelí ha tenido como objetivo el Comité Islámico de Salud, un grupo de defensa civil y rescate vinculado a Hizbulá, y ha matado a seis personas. Cuatro de ellas eran paramédicos.
Agresiones contra Beirut
También en la capital, Beirut, se han registrado ataques constantes. Durante los últimos cuatro días, los aviones de guerra y los drones israelíes bombardean los suburbios sureños de la ciudad mediterránea cada pocas horas. En estos casos, sí que suelen mandar avisos a la población civil para que evacúe. Las 700.000 personas que vivien y trabajan en Dahiye, el nombre en árabe para los suburbios del sur de la capital, ya hace semanas que han abandonado sus hogares, pero, a menudo, durante el día, suelen volver a sus casas para recoger pertenencias, ya que la nueva normalidad impuesta por Israel limitaba los ataques por la noche. Pero ahora también tienen lugar a plena luz del día pulverizando edificios de 10 o 12 plantas en apenas segundos ante la mirada atónita de los beirutíes.
Desde octubre del año pasado, los bombardoes israelíes han dañado casi 100.000 casas, principalmente en el sur del Líbano. Un informe del Banco Mundial ha proporcionado estimaciones de los daños entre el 8 de octubre de 2023 y el 27 de octubre de 2024: «el conflicto ha dañado aproximadamente 99.209 unidades de vivienda». A su vez, la violencia hebrea en territorio libanés ha costado al país 5.100 millones de dólares en pérdidas económicas a un Estado que ya sufría una de las peores crisis financieras de todo el mundo desde el siglo XIX. Este jueves Reuters informó que la embajadora de Estados Unidos en el Líbano presentó un borrador de una propuesta de tregua al presidente del Parlamento y aliado de Hizbulá, Nabih Berri.
Aprobación de Trump
«Se trata de un borrador para obtener observaciones de la parte libanesa«, dijo a Reuters una importante fuente política libanesa. La embajadora estadounidense Lisa Johnson se reunió el jueves con Berri, que es el principal interlocutor para la diplomacia con Hizbulá, para presentar la primera propuesta escrita de Washington en al menos varias semanas, según dos importantes fuentes políticas libanesas. Ninguna de las dos pudo proporcionar detalles sobre el contenido de la propuesta. Según The Wall Street Journal, el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, aprobó la propuesta el domingo durante una reunión con el ministro de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer, en Mar-a-Lago y expresó su esperanza de que se implementara antes de que asuma el cargo el próximo 20 de enero.
Por su parte, el nuevo ministro de Asuntos Exteriores israelí, Gideon Sa’ar, le dijo a su homólogo francés, Jean-Noel Barrot, que había «progresos» en los intentos de alcanzar un alto el fuego en el Líbano que permitiera a los israelíes regresar a sus hogares de manera segura. Sa’ar subrayó que se debe garantizar la implementación de cualquier acuerdo, incluyendo mantener a Hizbulá alejado de la frontera y evitar que se rearme a través de Siria. Mientras en el Líbano los ataques israelíes han matado a 3.386 personas y herido a 14.417 desde octubre del año pasado, al menos 43 civiles han perdido la vida al otro lado de la frontera. Otros 69 soldados israelíes han muerto con crecientes bajas desde el inicio de la invasión terrestre del sur del Líbano a principios de octubre.
