El líder y el colíder se citan esta noche en Montjuïc. /esEl Barça de Flick es el líder venido a menos porque en un inesperado otoño ha enterrado una ventaja que le daba calma y sosiego. Obligado a concluir la primera vuelta del torneo con un triunfo que le devuelva la estabilidad perdida para evitar asomarse al abismo de las dudas. «No, no es una final, es el último partido de 2024», dijo ayer Flick para liberar de más presión a sus jugadores.
«Si en verano te dicen que el 20 de diciembre estaríamos así todos lo habríamos aceptado porque nadie lo habría dicho», dijo recordando que su equipo «es líder de la Liga y segundo en la Champions», siendo como es un proyecto en formación «ya que hemos perdido a cinco jugadores experimentados en el verano, solo han llegado dos, Dani Olmo y Pau Víctor, y los jóvenes de La Masia», añadió en una alusión que recordó al mensaje más puramente xavista.
El Atlético, 11 victorias de 11
Todo se le complica al Barça sin Lamine y con el recuperado Ansu Fati porque enfrenta tendrá al renacido Atlético de Simeone. Ha sumado once victorias (seis de ellas en la Liga), encaramado al coliderato capaz como se ve de asaltar el trono azulgrana a pesar de que hace cinco semanas lo tenía a 10 puntos.
Y ese fútbol, eficaz y ofensivo del ‘Cholo’, que nunca ha ganado en Barcelona, se transforma hoy en una peligrosa amenaza para un desorientado Barça.
Nada es ahora lo que fue en la Liga, impresionada por el ‘método Flick’ que le hizo volar en los tres primeros meses. De repente es como si el equipo se hubiera quedado sin alas, siendo transparente -recibió 20 goles, casi el doble que el Atlético, con 11 encajados en un partido menos- al que la fórmula del fuera de juego ya no le basta.
Simeone, en cambio, ha resurgido de un inicio oscuro donde se llegó a poner en duda la fuerza de su mensaje. «Lamine es extraordinario y en los duelos es de los mejores que hay. Características a las suyas el Barcelona no tiene», dijo aliviado el técnico del Atlético.
El ‘Cholo’, una vez ha cambiado media plantilla abriendo la caja del Metropolitano para invertir este verano 185 millones de euros en la llegada de Julián Álvarez, Gallagher, Le Norman y Sorloth, ha encontrado la senda adecuada.
Tardó, pero Simeone ha superado otro momento delicado y sube hoy a Montjuïc dispuesto a tumbar al Barça y abrir, si ganara el encuentro aplazado contra Osasuna, un boquete de seis puntos de ventaja, algo impensable hace poco más de un mes.
Ese irresistible ascenso del Atlético (18 puntos de 18 posibles) ha tenido más impacto por el derrumbe azulgrana, que solo ha sumado cinco de 18. Eso obliga a Flick, tras dos incomprensibles derrotas en casa ante Las Palmas y Leganés, a encontrar soluciones con urgencia para tapar el agujero abierto en el equipo.
El mejor ataque contra la mejor defensa
Líder y colíder suben a la montaña para dilucidar quien manda de verdad en el campeonato. Es el Barça, el mejor ataque de la Liga (50 goles suma). Y se enfrenta al Atlético, que posee la mejor defensa del campeonato (11 tantos recibidos por Oblak, que ha dejado la portería a cero en nueve de los 17 encuentros).
«No estamos contentos con la situación, pero vamos a luchar hasta final de temporada. Batallaremos porque queremos ganar títulos»
«El equipo ha mejorado y está concentrado», ha dicho Flick intentando restar trascendencia al bajón de su equipo. «No estamos contentos con la situación, pero vamos a luchar hasta final de temporada. Batallaremos porque queremos ganar títulos», ha añadido el alemán, quien ha decidido dar descanso esta semana durante 48 horas a sus jugadores.
«Llevaban varias semanas sin días de pausa. Tomamos la decisión después del partido contra el Leganés. Fue algo correcta. He visto al equipo muy bien en los entrenamientos de estos dos últimos días», ha indicado el entrenador del Barcelona.