Barcelona dijo el martes que no quiere repetir como sede de la próxima Copa América de vela y, desde entonces, se han alzado las voces de múltiples actores, sobre todo del espectro económico, que reclaman que se reconsidere la decisión. El último ha sido el deporte catalán, de la mano de la Unió de Federacions Esportives de Catalunya (UFEC). Su presidente, Gerard Esteva, ha invitado a las administraciones a «reflexionar» para que la capital catalana acoja de nuevo la competición deportiva en la próxima edición.
«Pedimos que se vuelva a hacer y que se explique lo que ha significado la celebración de la Copa América«, ha reivindicado Esteva, que también es miembro del Patronato de la Fundació Barcelona Capital Nàutica, que aglutina a las administraciones, Port de Barcelona, Cambra de Comerç, Turisme de Barcelona y Barcelona Global. Esta última asociación también ha pedido una reunión de los implicados para tomar una decisión conjunta.
La UFEC ha asegurado que el acontecimiento deportivo ha estado «alineado» con los valores que hace tiempo que se impulsan desde su entidad, como por ejemplo el fomento del deporte femenino o de los jóvenes, con sendas competiciones en las que se ha podido ver la proyección de los regatistas. Esteva también ha subrayado que la Copa América ha servido para impulsar proyectos de descarbonización náutica; ha transformado urbanísticamente el litoral de Barcelona; ha democratizado la vela entre los más jóvenes o ha organizado actividades en el seno de la Regata Cultural, como la ceremonia de inauguración o el concierto de Josep Carreras y Sara Baras, con miles de asistentes.
60 millones por la F1 en Madrid
El máximo representante de la UFEC ha defendido la inversión pública de 45 millones de euros (54,45 millones si se suma el IVA) que se ha desembolsado para acoger el evento durante dos meses en la ciudad y ha afirmado que «cualquier acontecimiento internacional» de este calado se mueve con estas cifras. «Por ejemplo en el caso de Madrid, que acoge la Fórmula 1 solo por un fin de semana se le pagan 60 millones al organizador», ha advertido Esteva después de recordar que el 25% de los fondos «han sido para proyectos de legado«.