La Premier League continúa siendo la liga más rica, más poderosa y más potente de Europa. Lejos muy lejos de todas las demás. Por detrás la persiguen la Bundesliga y detrás la española. Nada cambia en el panorama futbolístico, salvo las particularidades de cada club con su economía y sus resultados. El Manchester City y el Real Madrid se han intercambiado las plazas en el liderazgo de los ingresos, con el Barça en tercer lugar.
Tampoco se ha dejado de elaborar el informe de la situación patrimonial y financiera de los clubs de las cinco grandes ligas europeas que comenzó a realizar José María Gay de Liébana. Dos años después del fallecimiento del prestigioso economista (el 16 de julio de 2021), sus colegas, compañeros, alumnos y amigos han continuado el trabajo para arrojar un haz de luz al funcionamiento del fútbol con la presentación del estudio Las finanzas de las 5 grandes ligas de fútbol europeas en 2022-23.
Desequilibrio y endeudamiento
El informe ha detectado un incremento general del merchandising en las tres columnas principales que sostienen el presupuesto de los clubs, junto con los derechos de televisión y los ingresos por entradas y carnets de socios.
La tendencia apunta a un sostenido desequilibrio que ha abierto ya una brecha en el fútbol europeo entre los 20 clubs mayores de Europa y el resto de los competidores en sus respectivas ligas: esa élite genera más de la mitad de los ingresos de los 118 de las primeras divisiones. Pero también se produce una «preocupante situación» por el «excesivo endeudamiento» que se acumula, en palabras del economista Martí Garcia Pons, que presentó y analizó el informe junto a Josep Sanfeliu, socio del despacho JM Gay y Sanfeliu Auditores.
La Premier ha disparado sus ingresos de 5.440 a 7.477 millones en 8 temporadas (desde 2018 a las previsiones de la campaña 24-25), mientras que la Liga compite con la Bundesliga por el segundo lugar: 100 millones de ventaja de la organización alemana (3.900 a 3.800). Los dos torneos partían de 3.168 y 3.073 millones en 2018. La Bundesliga es la competición más sostenible y con un gasto más racional de las cinco. Es la única que no arrastra pérdidas y, en cualquier caso, la deuda es inferior a los ingresos de explotación.
La de la Premier es insostenible a largo plazo por las sobredimensionadas inversiones que efectúan sus clubs, la mayoría gestionados por fondos de inversión, propietarios privados y sociedades. El campeonato inglés gasta un 94 % de los ingresos de explotación en las fichas y la amortización de los jugadores. Se eleva al 97% en la Ligue 1, baja al 83 % en España y al 75 % en la Bundesliga.
Seis de diez ingleses
Siete clubs ingleses tienen fondos propios negativos (ninguno de los grandes), por solo dos en Alemania, tres en España (Barça, Betis y Valladolid) cuatro en Italia (la Roma es el desastre mundial con 436 millones negativos) y ninguno en Francia.
El City y el Madrid son los clubs más poderosos en cuanto a ingresos, sobre todo porque sus éxitos ligueros y europeos han disparado sus ganancias por los premios económicos que reparte la Champions. Siete de los 20 equipos son ingleses (6 entre los 10 primeros), con cinco alemanes, cuatro italianos, tres españoles (Madrid, Barça y Atlético) y un francés. El PSG, claro.
Dinero asegurado
La clasificación viene determinada, fundamentalmente, por el premio económico que genera la Champions League. Se da la circunstancia de que los clubs reciben una cantidad por participar, igual para todos, y una cuota variable por el coeficiente de la UEFA, de forma que tienen garantizado un dinero que permite cubrir malos ejercicios deportivos. Se da el caso que en la campaña 22-23, Madrid, Barcelona, Bayern y Juventus fueron los que más dinero asegurado antes de que empezara la competición. El PSG se llevó todo el market pool de Francia por la incomparecencia de los demás compatriotas.
Los resultados de la liguilla y, sobre todo, las eliminatorias, determinaron que el City recibiera una millonada y el Barça terminara decimotercero, eliminado en la fase de grupos de la Champions y de la primera eliminatoria de la Europa League.
El insostenible Barça
El estudio reserva un apartado para el caso del Barça, que para los economistas presenta «una situación complicada», definible como «insostenible» porque tiene más deudas que activos y recurre a los ingresos extraordinarios constantemente para seguir avanzando, inmerso en una «reestructuración permanente».
Los analistas alertaron de la inaplicación del artículo 67 de los estatutos azulgranas para que los gestores puedan eludir los límites que se autoimpuso en club para evitar el riesgo de la quiebra. Los ingresos del Barça han descendido por el empeoramiento de los resultados (la conquista de la Liga quedó contrarrestada por la prematura eliminación europea). Sin embargo, la junta de Joan Laporta ha reducido los gastos deportivos de 626 millones (la nómina más lata de Eurocopa junto con el PSG) a 472 millones, reduciendo también las amortizaciones porque ha fichado menos jugadores y ha recurrido más a los canteranos.
El fútbol femenino aún no es sostenible
El fútbol femenino mantiene un crecimiento en todos los niveles, pero aún no es sostenible a nivel económico. El informe confronta la liga inglesa con la española. No lo es en ninguno de los dos países, más allá de que las dimensiones no pueden compararse con el sector masculino.
La Liga F dobló sus ingresos de una temporada a otra (18,1 millones a 39,6) pero siguió generando pérdidas. Los gastos ascendieron a 50 millones. El Barça es la gran excepción. Gana 14,1 millones, que representa la mitad de todo el fútbol español, y obtiene beneficios en su ejercicio económico.