La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha elaborado un informe para la jueza del caso Supercopa en el que apunta sus sospechas de que el futbolista Cristiano Ronaldo y el empresario Alejandro Agag, yerno del expresidente del Gobierno José María Aznar, intermediaran para facilitar los negocios de Luis Rubiales y Gerard Piqué en Arabia Saudí.
Dicho informe, al que ha tenido acceso EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, remarca que «de diferentes conversaciones telefónicas» de Ángel González Segura, directivo de la constructora Gruconsa que la investigación considera parte de la trama de Rubiales, se desprende que «tanto Cristiano Ronaldo como Alejandro Agag pudieran estar intermediando para la consecución de este proyecto con las autoridades saudíes».
El «Estadio 7 Estrellas»
El informe se refiere al proyecto «Estadio 7 Estrellas», que contemplaba la construcción en Riad, la capital saudí, de un macrocomplejo deportivo que incluiría «una ciudad del fútbol, hoteles, centros comerciales, centros de negocios e infraestructuras de transporte», según se recoge en el informe, que sitúa estas conversaciones en enero de 2024.
Para entonces, Cristiano Ronaldo ya era futbolista del Al-Nassr, club de la liga saudí desde el verano de 2023; Alejandro Agag, por su parte, es un empresario conocido por sus inversiones en el mundo del motor, entre las que se incluyen la presencia de la Fórmula E (la versión de Fórmula 1 para coches eléctricos) en Arabia Saudí.
El informe de la UCO no entra en detalles sobre la posible participación de ambos en los negocios de Piqué y Rubiales en el reino saudí, más allá de reseñar su sospecha y de asociarla a un correo entre dos empresas vinculadas a la trama, Gruconsa y Dismatec, en el que se habla de «Contrato Agar». La Guardia Civil estima que «pudiera referirse a Alejandro Agag» y desarrolla entonces las conversaciones telefónicas de González Segura de las que se desprendería el presunto vínculo con Cristiano y el yerno de Aznar.
Un acuerdo de 20 millones de euros
El negocio recogía un contrato entre Gruconsa y Dismatec para la adjudicación de dicho proyecto «por el que se acordaba un pago de 20 millones de euros a pagar por la constructora a Dismatec en caso de conseguir la adjudicación».
«En dicho precio pudiera estar incluido el beneficio de Rubiales, al ser éste la persona que habría facilitado el contacto en Arabia Saudí, según apuntaba Ángel [González Segura] en la llamada reseñada. Así puede inferirse igualmente de un documento manuscrito hallado en el registro del domicilio de Ángel, en el que se hace un posible reparto de beneficios en tres partes en relación al proyecto de Gruconsa en Arabia Saudí, observándose que “Luis” y “Nene” [amigo y socio de Rubiales] están contemplados juntos», recoge el informe de la Guardia Civil.
«Tenemos que estar ahí»
El informe de la UCO también recoge conversaciones de Rubiales y Piqué muy anteriores al proyecto «Estadio 7 Estrellas», de febrero de 2021. En ella, ambos hablaban del proyecto Neom para construir una gran ciudad futurista en Arabia Saudí. «Tenemos que estar ahí», le dijo el entonces futbolista del Barça a quien era presidente de la RFEF, a lo que este le contestó: «Totalmente. Hay que estar ahí».
Todos estos indicios han llevado a la Guardia Civil a instar a la jueza Delia Rodrigo a que solicite una comisión rogatoria a las autoridades saudíes para que le detalles los movimientos bancarios de una docena de personas físicas (entre ellas Rubiales y Piqué) y 15 personas jurídicas, incluidas varias empresas del holding Kosmos propiedad de Piqué, incluido el FC Andorra, así como Gruconsa, Dismatec y GRX Sport, empresas que la investigación considera parte de la trama.