El Juzgado de Instrucción número 6 de Barcelona está investigado al presidente del FC Barcelona Joan Laporta por una presunta estafa de 4,7 millones de euros cometida entre 2016 y 2018. Una familia se querelló contra Laporta y dos personas más, un comercial de un concesionario de Sant Cugat y una trabajadora bancaria, por invertir en la sociedad CSSB Limited y no conseguir el dinero acordado. El pasado mes de noviembre, el magistrado citó a declarar al mandatario azulgrana, así como a otros dos imputados, para este próximo lunes.
En 2014, los querellantes J.M.L. (en ese momento desempleado), su esposa I.M. (cocinera en un restaurante) y su hija D.L. (enfermera) consiguieron un premio de 34 millones de euros en la lotería Primitiva. Entonces la familia decidió comprar un vehículo de alta gama, un Lamborghini, en un concesionario de Sant Cugat. Una vez allí hablaron con el comercial que les atendió sobre la mejor forma de invertir el dinero y éste les recomendó a su entonces pareja, que era una asesora de Bankinter.
De esta forma, les ofrecieron poner parte del dinero en la sociedad CSSB Limited por un capital 2.400.000 euros por un periodo de 3 años al 6% de interés anual. Según la querella que tramita el juzgado, el contrato, que se hizo efectivo el 1 de noviembre de 2017, presentaba defecto de forma al estar redactado en inglés, sin firma legible y tenía cláusulas perjudiciales para la familia inversora.
El asesoramiento
La querella remarca que el contrato presuntamente contó con el asesoramiento Joan Laporta, quien actuaba en nombre de CSSB Limited, pero también ejercía de abogado de la familia «garantizando así la solvencia de la inversión». En este sentido, los querellantes remarcan que confiaron en el actual presidente del FC Barcelona, ya que era un personaje público y los invitó al palco del Camp Nou en varias ocasiones, pero que Laporta presuntamente se aprovechó de su «falta de conocimientos financieros».
En dos años se firmaron cinco contratos distintos de préstamo, siempre con la misma asesora bancaria, con un interés anual del 6 al 7% por lo que la familia debería haber ganado 792.000 euros pero únicamente recibió 84.000 y tampoco se le devolvió la cantidad invertida. En este sentido, la querella remarca que se instó a los investigados a «devolver los importes defraudados, sin que ninguno de ellos mostrara voluntad alguna». En total, el juzgado investiga si CSSB Limited, con sede en Hong Kong, recibió 4,7 millones de euros de esta familia entre agosto de 2016 y agosto de 2018 y el papel que jugó Laporta en esta presunta estafa.