(ILUSTRACIÓN) . preservación del medio ambiente .
“En los años que me quedan a mí útiles quiero dejar una pequeña huella de haber hecho algo significativo para el medio ambiente”, dijo la semana pasada Rolando González Bunster, presidente del Consorcio Energético Punta Cana Macao, S.A. (CEPM), cuando anunció que invertirá más de US$1,000 millones en eliminar de una vez por todas el riesgo y la volatilidad de los combustibles fósiles de la tarifa eléctrica de CEPM.
La idea, afirmó, es poder limpiar y tener un futuro de energía limpia en la zona de mayor auge turístico de la República Dominicana: el área que va desde Juanillo hasta Miches, que por demás está llena de bellezas naturales, manglares, lagos, ríos y playas que deben ser preservados.
Para lograrlo, González Bunster ha hecho el compromiso de que en los próximos seis años creará una nueva planta de más de 700 megavatios de energía renovable (solar, eólica e hidráulica de bombeo), además de que creará hidrógeno verde para energizar las plantas eléctricas.
La determinación de González Bunster es un ejemplo. Escucharlo decir que cumplirá con ese compromiso aunque tenga que vender todo lo que tiene es una lección de vida. Nosotros, ¿qué vamos a hacer para salvar nuestra tierra? Empecemos con apagar las luces y ahorrar más agua.