Hace unos días, el Reino Unido se convirtió en el primer país de occidente en aprobar y posteriormente iniciar a inocular a su población contra el COVID-19, utilizando la vacuna de Pfizer/BioNTech, pero entre los primeros vacunados se produjeron algunos casos de reacción adversa.
Como muchos otros países, los ingleses están priorizando al inicio de la campaña de vacunación a los trabajadores del sector salud y a segmentos vulnerables de la población, como los ancianos, sin embargo, la Agencia Regulatoria de Medicinas y Productos de Salud (MHRA por sus siglas en inglés) anunció que ya se tienen dos reportes de anafilaxia y otro de posible reacción alérgica.
La Jefa de la MHRA, June Raine, dijo que “cualquier persona con historia de anafilaxia por vacunación, medicina o comida no debe recibir la vacuna de Pfizer/BioNTech”.
La anafilaxia es una reacción de hipersensibilidad seria generalizada o sistémica provocada por sustancias externas a nuestro organismos, como son los alimentos, medicamentos y picaduras de insecto. Esta rápida reacción alérgica es seria y puede ser fatal, presentando síntomas de inflamación de la garganta, brote que rasca y baja de la presión arterial.
Sin embargo, Raine aseguró también que “en la mayoría de personas no se producirá la anafilaxia y los beneficios de proteger a la gente contra el COVID-19 superan los posibles riesgos… Pueden estar confiados que esta vacuna cumple con los robustos estándares de seguridad, calidad y efectividad de la MHRA (regulador de medicamentos británico)”.
Pero otro país donde se registra ya la primera reacción adversa en los primeros vacunados fue en los Estados Unidos de América (EE.UU.), donde coincidencialmente, a otro trabajador de la salud, específicamente en Alaska, la misma vacuna Pfizer le produjo una alergia severa. Sin embargo, a diferencia de su contraparte inglesa, la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA por su siglas en inglés) de los EE.UU. aseguró que la vacunación debería ser segura para la mayoría de personas con historial de alergias.
La FDA comunicó que sólo quienes hayan tenido reacciones alérgicas severas previas, y específicamente por vacunación o ingredientes dentro de esta vacuna particular, deberían evitar inocularse por ahora. Por otra parte, el paciente estadounidense, ingresado en el Hospital Regional Bartlett de Juneau, no tiene historial de alergias previas.
De su lado, la empresa Pfizer dice que su vacuna viene con la clara advertencia de que un adecuado tratamiento médico y supervisión debe estar siempre disponible en caso de anafilaxia, pero aseguran que estarían dispuestos a actualizar el lenguaje en la etiqueta si fuere necesario.
Estos incidentes se producen en medio de niveles de desconfianza considerable de las personas respecto a vacunarse, fundamentados principalmente por miedos generados por la desinformación, pero personalidades importantes, como Joe Biden, Bill Gates, Barack Obama, entre otros, han anunciado que se vacunarían en público en los próximos días, para contrarrestar la errada percepción de que las vacunas no son seguras.
Expertos coinciden en que por lo menos el 70% de la población mundial debe ser vacunada para frenar la pandemia del coronavirus, y aunque los gobiernos pueden inducir a las a personas a ponerse la vacuna, estableciéndola como requisito previo para algunos trabajos de alto riesgo, o para viajar, por ejemplo, lo cierto es que para la mayoría de las personas será una decisión voluntaria, por lo que es fundamental generar la confianza necesaria en la sociedad.