Esto pese a que los horarios de oficina se mantienen igual y a los empleados se les hace tarde en las calles para llegar a sus casas antes de la 7 de la noche, cuando está prohibida la circulación vehicular. El toque de queda de lunes a viernes es de 5:00 de la tarde a 5:00 de la mañana, pero se permite la circulación vehicular hasta las 7:00 de la noche.
La Opret alega que las largas filas de usuarios se deben a que se está el acceso al tren se está permitiendo de forma fraccionada, para evitar aglomeraciones en las instalaciones y vagones, como parte del protocolo por el coronavirus.
“Para evitar, que todo usuario que permanece en fila hasta las 6:00 p.m. se quede sin transporte, la Opret cuenta con trenes de reservas que permiten el transporte hacia su destino a esa hora del día” dice la nota, al recordar que el horario de funcionamiento es hasta las 6:00 de la tarde.
La entidad asegura que “hasta el momento, el Metro de Santo Domingo nunca ha dejado usuarios sin traslado después que está en fila en cierre de puertas.
Llamó a seguir haciendo conciencia sobre la necesidad de mantener las medidas de prevención y apeló a la comprensión, pues el objetivo es llevar a los usuarios bien a su destino y garantizarle la salud.
La tarde del jueves se aglomeraron cientos de personas en distinta estaciones del Metro, vociferando que abrieran las puertas para abordar, lo que fue difundido en medios digitales y redes sociales.