Barcelona será una de las siete fábricas de inteligencia artificial de la Unión Europea. El Barcelona Supercomputing Center-Centro Nacional de Supercomputación (BSC-CNS), que aloja el supercomputador MareNostrum 5, uno de los más potentes del mundo, ha sido seleccionado por Bruselas y recibirá una inversión cercana a los 200 millones de euros para desarrollar un ecosistema de sistemas avanzados de IA que acelere la adopción de esta tecnología.
Este martes, la Comisión Europea ha anunciado la aprobación del proyecto AI Factory, que a partir del próximo año movilizará 1.500 millones de euros para crear una red europea de superordenadores que impulse la investigación, el desarrollo y la innovación (I+D+I) tecnológica entre los 27 miembros del club comunitario, posicionando así Europa como referente mundial en el emergente mercado de la IA.
En España, esta misión estará en manos del BSC-CNS. Su propuesta incluye una mejora de las capacidades del MareNostrum 5 para que que pueda entrenar y desarrollar modelos de IA generativa a gran escala que tengan un impacto positivo tanto para el tejido empresarial como para la administración pública. Ambos sectores podrán así acceder a recursos de computación de alto rendimiento, pero también a cursos de formación técnica. Reforzado con tecnología de última generación, el superordenador con sede en la ciudad condal dará servicio a ámbitos tan diversos como el farmacéutico, el financiero, el energético o el climático.
El Gobierno central ha anunciado este martes que aportará 62 millones de euros al proyecto que canalizará a través del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades y del Ministerio de Transformación Digital y de la Función Pública. La Generalitat de Catalunya destinará otros 14 millones. Además, AI Factory contará con aportaciones internacionales: Portugal añadirá 15,6 millones; Turquía, 6,5 millones; y Rumanía, un millón de euros.
Este ambicioso proyecto europeo se traducirá en la creación de cinco nuevos superordenadores optimizados para IA en Finlandia, Alemania, Italia, Luxemburgo y Suecia. Solo España y Grecia, con su superordenador DAEDALUS, gestionarán esas fábricas de innovación desde infraestructuras ya existentes. El BSC-CNS contará además con una plataforma experimental que servirá para desarrollar y probar aplicaciones de vanguardia de IA, una función que también se desplegará en la factoría finlandesa.